may. 13, 2015
Por Tomas Miller
Por María Luisa Hayem y Tomás Miller
Las remesas internacionales, o el dinero que los migrantes envían a sus países de origen, suelen convertirse en titulares de noticias por lo elevado de su monto. En 2014, por ejemplo, las remesas recibidas en América Latina y el Caribe lograron superar su máximo histórico de 2008, alcanzando los 65,4 mil millones de dólares. Pero más allá de su monto, las remesas son una herramienta importante para la inclusión financiera de América Latina y el Caribe. A lo largo de los 13 años que llevamos trabajando el tema de remesas hemos visto avances importantes en términos de reducción de costos de su envío; usos de tecnologías, como el internet y la telefonía móvil, para facilitar su envío y recepción; mayor eficiencia en la distribución mediante incrementos en puntos de recepción de las remesas, incluyendo por medio de corresponsalías bancarias; entre otros.